"Quien enseña aprende al enseñar y quien aprende enseña al aprender"Paulo Freire

En la vida nos ocurren cosas, cosas ajenas a nosotros mismos, pero que nos ocurren a nosotros y que por lo tanto, nos modifican. La educación se trata de eso mismo, de experiencia, experiencia en relación con los demás que provoca efectos subjetivos en nosotros, ya que, cada ser humano recoge y toma como prioridad aspectos distintos. Así pues, esa experiencia es única e irrepetible y lleva consigo sentimientos igual de únicos.
El
ser humano es un ser que nace vacío, abierto al mundo, a las sensaciones,
sentimientos y al conocimiento, por lo tanto, la persona es vulnerable a los
cambios, cambios que se producen como he dicho anteriormente, a raíz de la
educación y no se puede entender la educación son esa relación con los demás.
Podrías
pensar que cuando vais a la escuela aprendéis por vosotros mismos, pues en
realidad no, en realidad estáis interactuando constantemente con el educador,
con el profesor, aunque seas tú quien estudia solo en casa, se da una relación
entre profesor y alumno, una relación educativa que hace que tanto profesor
como alumno compartan conocimientos y comportan valores. Es importante incluir
que muchos de los profesores actuales no parten de esa concepción, no parten de
la suposición de que aprendemos unos de otros, de que en la educación se
da esa bidireccional, ese toma y daca,
ya que, el educador adopta el rol de autoridad, de estar por encima de los
educandos y desde esto, no se puede dar una verdadera relación educativa porque
la comunicación entre ambos siempre va a estar condicionada, no puede ser
natural, ni puede haber intercambio de valores, ya que el profesor imparte y el
alumno aprende. Sin embargo, en el ámbito de la educación no formal, en el
ámbito de trabajo del Educador social se debe dar una relación igualitaria
porque busca el desarrollo íntegro de los individuos para conseguir con ello,
que estos se empoderen y transformen la sociedad, y esto no se puede conseguir
partiendo de una relación de “oprimido” y “opresor”, partiendo desde un rol de
autoridad, sino que debe llevarse a cabo mediante una relación igualitaria
dando importancia al sujeto en el desarrollo de su propia identidad y
aprendiendo unos de otros.
Para
concluir podemos afirmar que la educación se trata de viajar por un mismo
camino, hacia un mismo rumbo, hacia el desarrollo de la persona, potenciando sus capacidades creando así una
identidad propia.